Torreadrada, un pequeño pueblo de Segovia, es el último en sufrir una oleada de robos en esa provincia. Los ladrones entraron en una veintena de casas, la mayoría deshabitadas, aunque en algunas, sus propietarios estaban durmiendo dentro. Los cacos no se conformaron con asaltar viviendas particulares. También lograron entrar en el ayuntamiento y el consultorio médico.

En Torrreadrada un pequeño municipio segoviano apenas quedan casas que no hayan sido forzadas por los ladrones. Entraron en una veintena de viviendas en la madrugada del domingo al lunes, los vecinos sospechan de un par de desconocidos que merodearon por el pueblo ese mismo día.

Sólo en algunos casos los cacos han ocasionado desperfectos también en las puertas, lo más grave de los robos son los destrozos. La mayoría de los vecinos han cambiado ya las cerraduras de sus puertas, confían en que los ladrones no vuelvan al pueblo aunque no terminan de entender que buscaban en esta pequeña localidad de unos 50 habitantes.