CAZA | Media veda

Pocos disparos en la primera mañana de caza

  • Se abre la media veda con una escasez generalizada de codornices

  • Los aficionados lo achacan a los cambios de los últimos años en los cultivos

rtvcyl.es

Se abre la media veda con una escasez generalizada de codornices. Una campaña que los cazadores ya definen como 'desilusionante'. Apenas se ha visto rastro de la estrella de la temporada: la codorniz. Según este colectivo cada año es más difícil que se queden en el centro y en el sur de Castilla y León porque nuestros campos ya no son un buen cobijo para ellas.

Suben un 1,25% las licencias de caza en Castilla y León

   La comunidad autónoma de Castilla y León tramitó un total de 31.436 licencias de caza en el primer semestre de 2015, lo que representa un incremento del 1,25 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2014, cuando se computaron 31.047.

   Según los datos aportados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, de las 31.436 licencias de caza concedidas entre el 1 de enero y el 30 de junio de 2015, la mayor parte, 24.616, se registraron en los servicios centrales, mientras que por provincias el mayor número de permisos se formalizaron en León (1.416), seguida de Palencia (1.047), León (1.013), Ávila (798), Valladolid (622), Salamanca (596), Zamora y  Soria (502) y Segovia (324).

   A estos datos se suman las licencias computadas en lo que va de segundo semestre (del 1 de julio al 12 de agosto) cuando se han tramitado 8.290 permisos, una cifra que aumentará ante el inicio este sábado en Castilla y León de la tradicional media veda --así, el pasado año se concedieron un total de 24.138 licencias entre el 1 de julio y el 15 de agosto--.

   Medio Ambiente ha expedido en el primer semestre del año otras 733 licencias para caza con galgo y 75 de rehala con fines de caza además de 65.846 de pesca.

La media veda de caza con novedades para cacerías colectivas

La media veda de caza se inicia, como ya es habitual en Castilla y León, este sábado, día 15 de agosto, y concluirá el 20 de septiembre aunque para la tórtola común y la paloma torcaz se retrasa el comienzo de la época hábil al 22 de agosto para que se dé por finalizado el periodo de cría de estas dos especies.

Esta media veda contará con "novedades reseñables" en materia de simplificación administrativa para cacerías colectivas y para utilización de zonas de seguridad. Además y según la orden publicada en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) tras ser trasladada a los consejos territoriales de Caza y a la Comisión de Caza del Consejo Regional de Medio Ambiente, se actualiza la orden de precintado en materia de lobo y la adecua a las cacerías colectivas de venado o corzo.

Según los días hábiles establecidos por el departamento que dirige Juan Carlos Suárez-Quiñones, la media veda en el territorio de Castilla y León oscilará entre los 20 y los 17 días en función de las provincias en las que se practique.

   En concreto, en la provincia de Burgos se han establecido un total de 20 días hábiles para la media veda que serán los siguientes: 15, 16, 18, 20, 22, 23, 25, 27, 29 y 30 de agosto y 1, 3, 5, 6, 8, 10, 12, 13, 19 y 20 de septiembre.

Del mismo modo, en las provincias de Palencia, Segovia y Soria se ha habilitado otro periodo de 20 días: 15, 16, 18, 20, 22, 23, 25, 27, 29 y 30 de agosto y 1, 3, 5, 6, 10, 12, 13, 17, 19 y 20 de septiembre.

En el caso de la provincia de Ávila, la media veda tendrá un periodo de 19 días hábiles (15, 16, 18, 20, 22, 23, 25, 27, 29 y 30 de agosto y 3, 5, 6, 10, 12, 13, 17, 19 y 20 de septiembre) mientras que en León y Valladolid habrá uno menos, hasta un total de 18 (15, 16, 18, 20, 22, 23, 25, 27, 29 y 30 de agosto y 1, 3, 5, 6, 8, 10, 12 y 13 de septiembre).

Finalmente, el menor periodo de días hábiles se ha establecido en las provincias de Salamanca y de Zamora, donde se han fijado un total de 17 jornadas para la práctica de la media veda: 15, 16, 20, 22, 23, 27, 29 y 30 de agosto y 3, 5, 6, 10, 12, 13, 17, 19 y 20 de septiembre.

En este caso, se ha dado permiso en toda la provincia de Salamanca mientras que en Zamora se ha circunscrito exclusivamente a la zona situada al Este y al Sur de una determinada línea definida en la orden de la Consejería.

Los días fijados como hábiles para la práctica de la caza de las especies incluidas en la media veda se entienden como máximos por lo que el titular o los titulares de los cotos podrán a la vista de la evolución de las distintas especies reducir el número de días, establecer cupos o fijar el horario en el que ha de practicarse.

Por su parte, la temporada general para la caza menor comenzará el cuarto domingo de octubre y finalizará el último domingo de enero.

En cuanto a la caza mayor, la temporada montera se extenderá desde el domingo 27 de septiembre hasta el domingo 21 de febrero de 2016 y se hacen coincidir las fechas de aprovechamiento en cacerías colectivas -monterías, batidas o ganchos- tanto del jabalí como del ciervo o del lobo.

En el caso del lobo, cualquier acción de caza requerirá autorización expresa del servicio territorial de medio ambiente. Los recechos de ciervo, al igual que los de corzo, podrán realizarse desde el 1 de septiembre.

Simplificación administrativa

   Según consta en esta orden de caza recogida por Europa Press, se simplifican y reducen las cargas administrativas en materia de cacerías colectivas de manera que sólo requerirán autorización del servicio territorial de medio ambiente aquellas monterías o batidas/ganchos que se desarrollen en cotos incluidos total o parcialmente en el ámbito de aplicación del Decreto 108/1990, de 21 de junio, por el que se aprueba el plan de recuperación del oso pardo, o bien aquellas cacerías en las que se solicite la caza del lobo.

   En estos dos supuestos, para que la cacería se considere autorizada, deberá mediar resolución expresa del servicio territorial.

   El resto de cacerías se someten al régimen de comunicación de modo que si se presenta en registro la documentación requerida con una antelación mínima de diez días el ciudadano quedaría autorizado sin necesidad de recibir autorización expresa.

   Una de las "novedades más significativas" es la posibilidad de que en las cacerías colectivas el organizador pueda colocar los puestos en zonas de seguridad, tales como caminos de uso público no asfaltados, vías pecuarias y cauces o márgenes de ríos de menos de tres metros de anchura.

   En estos casos, el solicitante debe hacerlo constar en la documentación remitida a la administración y deberá cumplir con el requisito de señalización adecuada, advirtiendo sobre la realización de la montería, gancho o batida.

   Respecto a la utilización de zonas de seguridad de forma ordinaria, como por ejemplo en la caza menor al salto, el titular cinegético deberá hacerlo constar en su plan cinegético y aportar una declaración responsable que refiera consentimiento del titular de dicha zona de seguridad (en el caso de caminos, fundamentalmente entidades locales; en cauces, confederaciones hidrográficas y en vías pecuarias, Junta de Castilla y León).

   Finalmente, se actualiza la Orden MAM/829/2011, de 13 de junio, de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, por la que se establece el sistema de precintado de piezas de caza mayor para el control de la ejecución de los planes cinegéticos de los cotos privados y federativos de caza de Castilla y León, en materia de precintado del lobo, de normas para el precintado en cacerías colectiva -posibilitando el transporte de las piezas abatidas hasta la junta de carnes- y de unificación de plazos para la remisión de resultados.