SANIDAD

El enfermero escolar se implantará según la evaluación de necesidades sanitarias que hagan los centros

El sindicato de enfermería Satse y la organización sindical de docentes ANPE, que han pedido que la Junta no siga "dando largas" e implante esta figura de forma "progresiva"

Wellington Dos Santos Pereira
Europa Press

El enfermero escolar en Castilla y León se implantará en función de la evaluación de necesidades sanitarias que hagan los centros y que trasladen a la Consejería de Sanidad, pero no de forma generalizada en todos.

Así lo ha afirmado el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, quien ha afirmado que espera que "pronto" se pueda contar con la regulación para que se cumpla este compromiso del Ejecutivo, algo que han reclamado este martes el sindicato de enfermería Satse y la organización sindical de docentes ANPE, que han pedido que la Junta no siga "dando largas" e implante esta figura de forma "progresiva", primero al menos en los más grandes y con el objetivo de llegar a todos en tres o cuatro años.

Sin embargo, Sáez Aguado ha descartado que se vaya a poner personal de enfermería en todos los centros, algunos de los cuales ya hay, debido a las necesidades que presentan algunos de sus alumnos.

A este respecto, ha aclarado que se trabaja en una regulación "algo más amplia" que la actual en la que los centros educativos evalúen las necesidades sanitarias de los alumnos para posteriormente decidirse cuáles disponen de profesionales que podrían atender las mismas, algo que dependerá también del número de niños que lo necesiten.

El consejero ha insistido en que no se implantará "en todos los centros", aunque pudiera ser "en buena parte", sino en función de las necesidades, y por ello considera que tienen que ser ellos los que identifiquen esas necesidades, pero para todo ello hay que "ordenar" esta cuestión con esta regulación.

En esta línea, Sáez Aguado ha apuntado otro factor como es la atención y control en niños diabéticos, que "afortunadamente" con las nuevas prestaciones como el medidor continuo de glucosa ha reducido las necesidades que presentaban estos alumnos.

También ha incidido en que la presencia de personal de enfermería depende de las necesidades, ya que en el caso por ejemplo de un niño en Tordesillas, Aimar, se dispuso una enfermera pero no acudía todos los días porque por diversas razones el alumno no algunas veces no asistía a clase.