Han denunciado su situación laboral

Las intérpretes de lengua de signos desmienten a Adecco

  • Las intérpretes dicen que sí enviaron sus currículum a la empresa
  • Educacion está alerta para comprobar que se cumplen los requisitos

Estefanía Ureña

La polémica está servida. Por un lado la empresa Adecco, actual adjudicataria del servicio de interpretación que la Consejeria de Educación ofrece a los alumnos con discapacidad auditiva. Por otro, la Federación Regional de Sordos y las intérpretes de lengua de signos que, hasta ahora, eran las que prestaban ese servicio.

A principios de año la Consejería de Educación sacó a concurso público esta prestación. Se presentaron dos empresas privadas y la Federación Regional de Sordos. Ganó Adecco, pero la Federación recurrió argumentando que había ganado una oferta temeraria.

Para evitar que los alumnos se quedasen sin intérprete a principio de curso, siguieron acudiendo a clase los intérpretes de la Federación a la espera de una resolución que al final se decantó en favor de Adecco.

Adecco nunca ha negado que su oferta era la más barata. Pero señala que el servicio que presta es el mismo. La Federación, sin embargo, añade que detrás se esconden unas condiciones laborales precarias para los intérpretes y dice que el contrato que se les ha hecho es de administrativo.

Lo que más ha molestado a las antiguas intérpretes, las que trabajaban para la Federación Regional de Sordos, es que Adecco dijera que le hubiera gustado contar con ellas pero que nunca recibieron sus currículum, algo que desmienten. Las intérpretes afectadas dicen que han enviado su currículum a Adecco hasta en cuatro ocasiones.

De manera individual y grupal. Que incluso les hicieron un test, pero que nunca las llamaron. Sólo recibieron respuesta cuatro de las veintiseis trabajadoras. Esas cuatro son las que menos antigüedad tienen.

Tanto la Federación, como las intérpretes, temen que esta situación termine perjudicando a los alumnos. De hecho, según una madre de una alumna con discapacidad auditiva, su hija ha pasado a tener esta semana la mitad de horas de interpretación.

Ochenta alumnos en Castilla y León reciben este servicio. Adaptarse a un nuevo intérprete no es fácil. Cada uno "signa" de una manera diferente. Es como si hablaran con acento. Y esa particularidad confunde, sobre todo, a los niños más pequeños.

La Consejería de Educación dice que ya ha activado el mecanismo de control para comprobar el cumplimiento de los horarios y de los objetivos marcados en el pliego de condiciones del concurso.

Las intérpretes no han dudado en denunciar su situación. Argumentan que el conveni de su profesión les permite tener derecho a subrogacón. Eso significa que Adecco debería haber mantenido a los trabajadores de la Federación Regional de Sordos y en las mismas condiciones.