La administración concursal de Trapa, ubicada en Dueñas (Palencia) y que perteneció al Grupo Nueva Rumasa, estima que la supervivencia de la sociedad pasa por la venta de la unidad productiva al considerar que es imposible la negociación de un convenio con los acreedores, dado el desfase entre el activo y el pasivo.
Es la principal conclusión a la que han llegado los administradores concursales de las sociedades que engloban a la empresa chocolatera palentina tras presentar el informe de valoración ante el Juzgado de Primera Instancia Número 1 de Palencia, especializado en materia mercantil, según han informado hoy a Efe fuentes judiciales.
El informe de los administradores concursales, que tienen asumidas las facultades de gestión de la empresa por decisión judicial, expone de manera pormenorizada los datos contables de las sociedades, la lista de acreedores, la situación en la que se encuentran las sociedades y el apartado definitivo de conclusiones.
Según reflejan los datos del informe, los administradores concursales, tras analizar la documentación, sostienen que el desfase entre el valor de los activos (propiedades y recursos propios) y el pasivo (deudas y acreedores) hace inviable la concreción de un convenio de acreedores.
En este sentido, el valor de los activos y que viene reflejado en el informe asciende a los 53.889.000 euros, mientras que el montante pasivo supera los 180 millones de euros, concretamente 180.491.000 euros, datos contrastados a fecha del pasado 11 de noviembre.
Es por este motivo que la administración concursal aboga por la venta de la unidad productiva de las cuatro sociedades que conforman Trapa (Brookfield Promociones 21 SL, Soluciones Comerciales Trapa, Productora de Chocolates SL y Mitelman SA), es decir, instalaciones, medios de producción y el traspaso de los propios trabajadores, una unidad de producción que actualmente se encuentra a pleno rendimiento.
El informe también detalla que el número de trabajadores que actualmente forman parte del conglomerado de la chocolatera asciende a 121, repartidos entre Productora de Chocolates SL (88) y Mitelman SL (33).
Si finalmente se llevara a cabo la venta de la unidad productiva, en el caso de que aparezcan firmas interesadas en la adquisición, tendría que contar con el visto bueno del juez que ha autorizado el concurso de acreedores.
Este informe, tal y como establece la Ley Concursal, se notificará a quienes se hayan personado en el concurso, además de publicarse en el Registro Público Concursal.
Asimismo, el juez podrá acordar, de oficio o a instancia de interesado, cualquier publicidad complementaria que considere imprescindible, en medios oficiales o privados.
Por otro lado, las partes personadas podrán impugnar el inventario y la lista de acreedores, dentro del plazo de diez días a contar desde la notificación.
A partir de aquí, transcurrido el plazo de impugnación del inventario y de la lista de acreedores sin que se hubieren presentado impugnaciones, el juez dictará la resolución que proceda. EFE