350 familias de Castilla y León han solicitado alguna de las 22 medidas urgentes del decreto - ley de vivienda que busca ayudar a las familias más necesitadas, por ejemplo, fomentando el alquiler o con una moratoria de dos años en el pago de las cuotas de la hipoteca. Algunas de las solicitudes todavía están en trámite pero otras 192 ya se han cursado.

Un total de 31 familias, un tercio de ellas en León, se benefician ya de una moratoria de dos años en el pago de su hipoteca en conjunto por valor de 92.000 euros. Otras 26 familias han reclamado reestructurar la deuda. Ya se han concedido quince por un total de 156.000 euros.

El ejecutivo cree que esto es un indicador de que su situación no es de gran necesidad y que en general pueden hacer frente al pago de las cuotas. Eso sí, su situación tampoco es boyante. Ninguna familia ha solicitado la amortización anticipada de la deuda con lo que podría ahorrarse hasta un 30%.

Otro de los objetivos era dar salida al stock de 900 viviendas privadas. Poco se ha movido, sólo una decena de viviendas en Burgos se han vendido a propietarios que aunque no cumplían los requisitos las han adquirido para dedicarlas 5 años al alquiler.

54 inmuebles en Ávila se han acogido a otra de las opciones: acortar el tiempo para la declaración como vivienda libre a 10 años.

Es el balance de momento discreto de un proyecto de ley aprobado en Cortes en agosto y consensuado también en el diálogo social.