La salamantina Ana Fanlo, de 12 años de edad, acompañará a los líderes europeos en la ceremonia de recogida del Premio Nobel de la Paz, que se celebrará en Oslo el próximo 10 de diciembre. Ana es la menor de los cuatro ganadores del concurso de dibujo y redacción que las instituciones europeas organizaron para elegir a los representantes que formarían la delegación que recogería el galardón. El trabajo tenía que responder a la pregunta '¿Qué significa la paz en Europa para ti?'.
Ana dibujó "un mapa antiguo de Europa con una serie de engranajes movidos por la paloma" y acompañó el dibujo con la frase: "Europa es una gran máquina perfecta con un elemento motriz: la paz. Si falla uno, fallamos todos. Sigamos unidos", explicó la niña a Ical. A Ana , que cursa segundo de la ESO, le gusta la música, la naturaleza y los animales, y este concurso le ha hecho interesarse más por los logros de la Unión Europea.
El resto de jóvenes seleccionados son la italiana Elena Nicoletta Garbujo, de 16 años; la polaca Ilona Zielkowska, de 21; y el maltés Larkin Zahra, de 23. Los cuatro ganadores fueron escogidos entre más de 5.400 jóvenes procedentes de 33 países: los niños entre 8 y 12 años mandaron 1.173 dibujos; los de 13 a 17 años enviaron 1.870 redacciones; y los de 18 a 24, 2.354 textos.
Los cuatro jóvenes asistirán a la ceremonia en Oslo acompañando a los presidentes de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; del Consejo de la UE, Herman Van Rompuy; y del Parlamento Europeo, Martin Schulz. Aunque Ana ya ha viajado por distintos países europeos –como Francia, Inglaterra y Porgual- será su primera vez en Noruega.
El pasado 12 de octubre, el Comité del Premio Nobel de la Paz anunció que otorgaba el galardón de este año a la Unión Europea como reconocimiento a la tarea que ha hecho como garante de la paz, en un continente que ha protagonizado dos guerras mundiales.
El Comité Nobel recordó, también, que jamás hubo en Europa central un periodo tan largo de paz, y reconoció los logros de la Unión Europea también de puertas para afuera, como exportadora de valores de paz y democracia. Ana, por su parte, se alegra de que la UE haya conseguido "que no haya habido guerras durante muchos años y, en cambio, los países europeos se ayuden los unos a los otros".