EDUCACIÓN

'Informe Manu' o cómo ponerle voz y cara a las injusticias que sufren los estudiantes de Castilla y León

La exigencia es mayor en nuestra Comunidad en determinadas carreras y tener la nota más alta no garantiza la entrada a la Universidad, en competencia con otras regiones menos estrictas

Lucía Rodil

El informe que por primera vez constata la injusticia que padecen los alumnos de Castilla y León para acceder a la Universidad se llama Informe Manu; porque Manu es uno de los cientos de alumnos que tras un bachillerato brillante y una PAU exigente se quedaron con un palmo de narices y no pudieron estudiar la carrera de sus sueños en la universidad deseada.

Ahora Manu vive en Madrid su plan B, como reconoce su padre, Pablo Ruiz: "A pesar de él tener un buen expediente tanto en el Bachillerato como en la PAU, por motivos de notas muy altas de otras Comunidades Autónomas pues le han cerrado las puertas a estudiar en la Universidad de Valladolid".

Las autoridades educativas conocen estos tragos que pasan muchas familias. Y también saben el coste que supone la injusticia. Alumnos buenos, con vocación y aspiraciones, acaban pagando su sueño.

Una situación similar se vivió en casa de Patricia, otra estudiante de la Castilla y León, que tuvo que pedir un préstamo, como otras tantas personas que han tenido que derivar la educación de sus hijos a las privadas.

Tal es la indignación que en Zamora han creado una asociación para defender que la Universidad admita a los mejores de cada comunidad, independientemente de su nota.

En el balance todos los actores resultan dañados, tanto los alumnos, como las familias y, no lo olvidemos, la propia Universidad, que asiste a un declive del nivel de sus estudiantes.