La Junta y el Ayuntamiento de Venta de Baños, Palencia, rubricaron este martes un acuerdo por el cual ambas instituciones invertirán 120.000 euros, a partes iguales, para realizar labores de limpieza en los terrenos donde estaba ubicada la antigua azucarera de la localidad y, de este modo, "eliminar cualquier elemento de riesgo para el Medio Ambiente", explicó el consejero del ramo, Juan Carlos Suárez-Quiñones.
En este emplazamiento de la antigua azucarera venteña permanecen residuos que, en su mayoría, proceden de la demolición de las instalaciones industriales, además de residuos urbanos derivados de melazas, vinazas y alcoholes, recordó el consejero.
El consejero insistió en que los residuos existentes "no suponen un daño ambiental grave", ni constituyen un perjuicio "inminente" para la salud o el medio ambiente, aunque "generan molestias por emisión de olores que pueden generar molestias en la localidad" y recordó que, según un reciente informe de la CHD, tampoco se detectan afecciones en las aguas subterráneas.
Suárez-Quiñones reiteró que estas actuaciones se enmarcan dentro del Plan Integral de Residuos de la comunidad que contempla el apoyo al tratamiento de los suelos y de infraestructuras que gestionan los residuos industriales.
Los terrenos cuenta con el Proyecto de Actuación y Urbanización, aprobados por el Consistorio de Venta de Baños en el año 2007 y con un estudio de detalle aprobado un año después. Aunque, la actuación urbanística no se ha desarrollado y su promotor no ha gestionado los residuos, recordaron desde el Ayuntamiento.
En declaraciones a los periodistas, la alcaldesa de la localidad, Rosa María Juanes, afirmó que esperan que estas labores "se inicien en un corto periodo de tiempo", aunque "hay una instrucción penal y hasta que el juzgado dé la autorización no se podrá encauzar la situación".
Biomasa
En su visita a Venta de Baños, Juan Carlos Suárez-Quiñones visitó las obras de instalación de una caldera térmica de biomasa en el Colegio Ángel Abia, que sustituye la instalación de gasóleo del centro educativo, propiedad del consistorio.
En estas actuaciones, la Junta invirtió más de 104.000 euros, lo cual permitirá un disminución de las emisiones de CO2 de 56 toneladas al año. Una caldera de biomasa con una potencia térmica de 150 kilowatios que "proporciona las necesidades de calefacción del colegio", concluyó el consejero.