Un centenar de personas han reclamado a la Junta de Castilla y León que las ayudas al alquiler no se supediten a unos ingresos mínimos. La Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Ávila convocó la movilización ‘Trabajo, pan y techo’ con motivo del Día Internacional de la Vivienda y contra las “indignas” ayudas regionales “que dejan fuera a las familias sin ingresos”.

Así lo denunció la portavoz de la PAH, Sandra Velasco, en un mensaje directo para el consejero de Fomento, Antonio Silván, después de que hace una semana se entregara un escrito exigiendo la eliminación de la cláusula de ingresos mínimos.

Un total de 44 familias forman parte de la plataforma de Ávila, provincia donde se producen “dos desahucios diarios”, aseguró Velasco, que hizo un llamamiento a los afectados para denunciar públicamente su situación y pierdan “el miedo, la vergüenza y en sentimiento de culpabilidad” por sufrir esta situación.

La movilización contó con el apoyo de la asociación Abulenses Sin Empleo (ASE) y la Comunidad Islámica de Ávila. “Nos estamos muriendo de hambre y el que no, se suicida porque no puede pagar la hipoteca”, denunció la representante de ASE, Begoña Pérez, a las puertas de las oficinas del Ecyl, de donde partió la marcha, rumbo a la Delegación de Fomento de la Junta.

Además, criticó que la justicia solo actúe contra los pobres, y no contra los ricos, en alusión a las imágenes que portaban algunos manifestantes de políticos y banqueros y en las que exigían “juicio y castigo”.

Desde la Comunidad Islámica de Ávila advirtieron de que el porcentaje de parados en este colectivo alcanza el 70 por ciento, según indicó su secretaria, Marian Cuenca, que con este argumento se mostró en contra de la condición de ingresos mínimos para acceder a las ayudas de alquiler. La comunidad representa a unas 200 familias de Ávila.