CAMPO

La campaña apícola en Castilla y León arranca con buenas expectativas

Según el coordinador de UCCL Palencia y apicultor, Francisco Salvador, es una 'de los mejores en los últimos años' gracias a las condiciones climáticas y la abundante floración

Colmenas del apicultor Felipe García Plaza, de Abia de las Torres (Palencia) - Brágimo / ICAL
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La benevolencia climática del pasado invierno en el que las nevadas se alternaron con semanas de temperaturas suaves y la abundante floración que está trayendo la primavera están haciendo que el arranque de la campaña apícola en Castilla y León esté siendo "de los mejores en los últimos años", valoró el coordinador de la UCCL Palencia y apicultor, Francisco Salvador.

Las bajas de población de abejas han supuesto  aproximadamente un 15 por ciento, muy por debajo de otros años cuando la media de desaparición de estos insectos por el conocido como síndrome de despoblación y el ataque de especies invasoras rondó el 40 por ciento. Además, apuntó, las colmenas acumulan alimento suficiente para las abejas que unido a la mayor población hace que las explotaciones apícolas "estén más fuertes para afrontar enfermedades y ataques".

Agregó que el "golpe de calor" registrado días atrás ha adelantado la floración de determinadas plantas, lo que está contribuyendo a que la recolección del néctar sea abundante. Salvador valoró que si las condiciones climáticas siguen siendo favorables la cosecha de miel, que concluye a finales de agosto, podría ser muy buena. En estos momentos, cuando acaba de arrancar la campaña, los apicultores se encuentran realizando labores de preparación de los enjambres y de reposición de la población de las abejas.

Francisco Salvador informó que están empezando a regresar las colmenas de productores castellano y leoneses trashumantes, que son algo menos de la mitad de las 400.000 que se contabilizan en la Comunidad, procedentes principalmente de Valencia donde ya han llevado a cabo una primera cosecha de miel de azahar y romero. También hay colmenas de la Castilla y León en Asturias y Cantabria que en las próximas semanas empezarán a volver para que a mediados de junio se encuentren ya todas en tierras castellano y leonesas.

En 2014 en el conjunto de la región, se recolectaron 3.980 toneladas de miel en lo que fue una cosecha regular debido a las bajas temperaturas de la primavera y el corto verano. La provincia con mayor volumen de producción fue Salamanca, que sumó 2.342 toneladas, seguida de León con 472, Zamora que recogió 447, Burgos con 206 y Soria con 147. A la cola se situaron Palencia, que recolectó 141 toneladas, Segovia con 115, Ávila que recolectó 71 y Valladolid con un total de 39 toneladas.

La escasa cosecha, que fue general en toda España, ha producido, según Salvador, que apenas haya miel en el mercado y que el precio de la cera se haya disparado. Aludió a que mientras en años anteriores se pagaba a siete euros el kilo ahora se compra a diez euros, lo que encarece notablemente los costes de producción de los apicultores que utilizan la cera para la preparación de los enjambres. A estos costes, hay que sumar gastos derivados de la compra de tratamientos farmacológicos para combatir las enfermedades que afectan a los insectos y de combustible que utilizan los productores para desplazarse hasta el lugar donde se encuentran sus colmenas que vistan entre dos y tres veces por semana.

Además de enfermedades como la varroa o el ataque de especies exóticas invasoras, como la vespa velutina, o autóctonas como el oso, los apicultores castellano y leoneses tienen que enfrentarse a otros problemas como la proliferación colmenas trashumantes que cada año llegan a sierras y montañas de la Comunidad y la creciente incorporación de jóvenes a esta actividad ganadera que está haciendo que "la carga ganadera sea demasiado densa", valoró.

En Castilla y León hay, a grandes rasgos, dos zonas productoras de miel. Por un lado, la que se produce en las llamadas zonas tardías, de miles de bosque que presenta un color oscuro y que se elabora con néctar del brezo, principalmente. Corresponde a las sierras de Palencia, Burgos, León y Segovia. La otra zona productora se localiza al sur de la Comunidad donde la floración es más temprana y la miel presenta un color más claro.