900 ACABARON EN FAMILIAS DE ACOGIDA

La Junta de Castilla y León asumió la tutela de 1.400 menores

Milagros Marcos asegura que el presupuesto en protección a la infancia alcanzará los 151 millones

Ical

La Junta asumió el pasado año la tutela de 1.400 menores de edad, de los que 900 acabaron en familias de acogida gracias al programa que desarrolla en colaboración con Cruz Roja y por el que desde el año 1989 han pasado más de 4.000 menores en la Comunidad. Estos datos fueron ofrecidos hoy en Valladolid por la consejera de Familia e Igual de Oportunidades, Milagros Marcos, que participó en un acto organizado por Cruz Roja Española con motivo del 25 aniversario de la puesta en marcha del programa de acogimiento familiar, iniciativa de la que la Junta fue pionera en España.

Marcos recordó que el pasado año fueron 41.000 los menores que se beneficiaron de algún tipo de servicio a través de los sistemas de protección a la infancia de la Comunidad, de los 19.000 tuvieron que recibir alguna medida de protección, bien preventiva o de actuación directa. De esos 19.000, la mayoría pudo seguir conviviendo con sus familias y sólo 1.400 fueron separados y tuvieron que ser tutelados por la Junta.

“El reto es que los cien menores que ahora se encuentran en unidades residenciales esperando un acogimiento familiar lo encuentren pronto”, aseveró Marcos, que explicó que el principal objetivo es que los menores permanezcan siempre en el seno de sus familias y que, en caso de acogimiento, vuelvan lo antes posible con sus familias biológicas. En este sentido, el gerente regional de Servicios Sociales, Jesús Fuertes, aseguró que los estudios avalan que las probabilidades de integración en menores tuteladas son mayores en los casos de menores que han estado con familias de acogida que los que han pasado por centros residenciales.

Marcos también resaltó que junto a la formación, las familias que se suman a este programa solidario también reciben un apoyo económico por parte de la Junta. En concreto, la Consejería de Familia tiene previsto destinar el próximo año tres millones de euros al programa de acogimiento familiar, dentro de los 151 presupuestados para el sector de la infancia, “partida que no ha dejado de crecer desde el 2011 a pesar de la crisis”, aseveró Marcos.

Adolescentes, grupos de hermanos o discapacitados son los menores con más rechazo a la hora de beneficiarse de una familia de acogida, según explicó Marcos, que también se refirió al énfasis que está poniendo Cruz Roja en la localización de esta familias y en informarlas que durante todo el proceso tienen a su disposición el asesoramiento personal de un profesional de Cruz Roja.

Al mismo tiempo, resaltó que el número de familias acogedoras se viene incrementando e indicó que mientras en 2008 el 70 de los menores tutelados se encontraba en centros residenciales, ese porcentaje ha descendido ahora al 30 por ciento.

La consejera también indicó que la jornada de Cruz Roja, presentada por la periodista Rosa María Calaf y a la que también asistieron la presidenta de la Cortes de Castilla y León, María Josefa García Cirac, y la directora general de Servicios para la Familia y la Infancia del Ministerio de Sanidad, Salomé Adroher, sirvió para presentar el proyecto de ley de protección a la infancia del Gobierno, normativa en la que la Junta ha tenido una participación muy activa. Así, resaltó que la norma refleja la propuesta de la Consejería de Familia de que en el caso de menores de tres años tutelados el acogimiento siempre sea familiar y no residencial, y que los menores que cumplan la mayoría de edad no salgan del sistema de protección sin tener una forma de vida autónoma.

A su vez, felicitó a Cruz Roja por los 25 años en los que lleva trabajando de la mano de la Junta en la atención a la infancia, incluido el programa de acogimiento familiares que se inició de forma paralela a la convención de los Derechos del Niños de la ONU. “Ahora celebramos los 25 años del programa de acogida y de todo lo que ha sido el sistema de protección a la infancia en la Comunidad para poner en valor todo lo realizado, pero con el objetivo de seguir mejorando en la protección a los menores”.

Por su parte, el presidente de Cruz Roja en Castilla y León, Jesús Varela, hizo un llamamiento a toda la sociedad de la Comunidad para que no exista ningún niño en lista de espera para ser acogido por una familia, a la vez que destacó que durante estos 25 años el programa de acogimiento familiar, “aunque con altibajos” ha mejorado considerablemente.

Varela también subrayó que la crisis no ha tenido un reflejo en este programa y aseguró que “Castilla y León es una Comunidad tremendamente solidaria. No se le puede pedir más”.