Más de 100 organizaciones se unirán el próximo domingo 12 de marzo en Madrid a la convocatoria lanzada por Lobo Marley, Equo, Ecologistas en Acción, WWF, European Greens y la Alianza Europea para la Conservación del Lobo.
El objetivo de esta segunda "gran manifestación" en defensa del lobo ibérico es exigir a las administraciones central y autonómica que "detengan la constante matanza de lobos y lograr su protección".
El recorrido partirá de Atocha, frente al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, e irá hasta la Puerta del Sol, donde se leerá un manifiesto. Las organizaciones pidieron el apoyo de toda la ciudadanía para que participe en esta manifestación y "sea la voz del lobo en Madrid para pedir su protección".
Ecologistas en Acción remarcó, a través de un comunicado de prensa, que un año después de la "histórica manifestación" en defensa del lobo ibérico, que tuvo lugar en la capital de España, el 13 de marzo de 2016, esta especie emblemática "sigue perseguida". En este sentido, los ecologistas recalcaron que "es más urgente que nunca" reclamar su protección "efectiva y real". "Por ello, más de 100 organizaciones de todos los rincones de nuestra geografía vuelven a salir a las calles de Madrid para exigir al Gobierno la protección estricta del lobo ibérico en todo el país, al igual que ya ocurre en la vecina Portugal", argumentaron.
Las organizaciones convocantes subrayaron que esta especie, que forma parte del patrimonio natural en España, es la "controladora natural" de los herbívoros salvajes. Así, destacaron que su presencia "representa la salud de los ecosistemas" y por esta razón, la Unión Europea la declaró especie de interés comunitario.
Sin embargo, critican que la matanza "continua" de lobos que la Administración permite o incluso ejecuta, "hace imposible cumplir este imperativo legal". "Varían los criterios legales y las modalidades, pero el resultado es el mismo", lamanetaron.
Los convocantes expresaron que tanto al norte como al sur del Duero, tanto en reservas de caza como en espacios protegidos, los lobos son abatidos "con excusas sin validez científica, como la de disminuir los ataques al ganado". "Está más que demostrado que abatir lobos no consigue ese objetivo e incluso puede acrecentar el problema", aseveraron.
Los organizadores explicaron que durante siglos "ha habido una convivencia entre la fauna salvaje y la ganadería" y hoy día, "algunos ganaderos la mantienen". Al respecto y con el reto de que "cada vez sean más, es esencial que las administraciones fomenten medidas de prevención para reducir los ataques al ganado".
Sin embargo, denunciaron que la promoción y defensa desde Europa hacia la protección del lobo y en favor de la coexistencia "contrasta con la gestión cortoplacista de las administraciones públicas españolas, cuyas medidas se centran principalmente en los controles de población y en la matanza de lobos".
Por último, aseguraron que estas matanzas también perpetúan un modelo económico basado en actividades "minoritarias", que solo beneficia a unos pocos y elimina toda oportunidad de desarrollo de otras que llevarían prosperidad al mundo rural. "Un lobo vivo vale mucho más que uno muerto, en términos ecológicos pero también económicos", sentenciaron.