CAMPO

Por segundo año consecutivo los campos de Castilla se enfrentan a la Roya Amarilla

Un hongo que ataca especialmente al trigo y que en provincias como Burgos, Palencia y Zamora van camino de convertirse en una plaga.

rtvcyl.es

Los agricultores intentan salvar sus trigos con uñas y dientes. El hongo de la roya amarilla se extiende de manera invisible. Seca la planta e impide que engorde el grano. De no combatirlo a tiempo puede mermar las producciones en un 50 por ciento.

Proteger su cereal les llevará un sobrecoste añadido. Entre 20 y 40 euros por hectárea, depende de cómo prolifere en cada zona.

Por eso los labradores lanzan un dardo a la Administración. Insisten en que hay medidas tradicionales más efectivas, a día de hoy no autorizadas.

Las provincias más afectadas por ahora son Zamora, Burgos y Palencia.