La nueva subdelegada del Gobierno en Salamanca, Encarnación Pérez, pidió este martes "altura de miras" y "sumar imaginando soluciones" con el resto de instituciones, a las que solicitó "diálogo, respeto, crítica constructiva y coherencia", durante el acto de toma de posesión que tuvo lugar en la sede de la Subdelegación del Gobierno en Salamanca.
Pérez, quien también ofreció ''apertura a todas las sugerencias oportunas y viables para favorecer el progreso en el bienestar y la calidad de vida'' de los ciudadanos de Salamanca, comprometió por su parte "esfuerzo y dedicación" para lograr el "éxito en esa responsabilidad compartida".
La nueva subdelegada del Gobierno en Salamanca comenzó su discurso transmitiendo su gratitud ''por la confianza depositada'' en su persona ante ''un reto ilusionante de servicio público'', así como al anterior subdelegado en la provincia, Antonio Andrés Laso, ''por su trabajo durante este tiempo y el exquisito trato con el que se ha producido el relevo en la Subdelegación''.
Recordó entonces la nueva subdelegada del Gobierno en Salamanca su vinculación profesional con la Universidad de Salamanca, que le permitió ''un importante espacio de libertad y creatividad, favoreciendo un acercamiento a la verdad'', que ahora le permite aceptar ''el reto de la política'' para hacer ''un buen uso en el desempeño y conservar siempre el horizonte del servicio a la ciudadanía''.
Entre dichos retos, señaló la exigencia de ''una respuesta garantizada de seguridad, de participación y de atención diversificada a los distintos colectivos'' entre los que citó ''menores en situaciones de riesgo, víctimas de violencia de género, personas en exclusión social y pobreza, mayores y dependientes, personas del mundo rural, inmigrantes o personas con discapacidad'', entre otros.
Por su parte, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, tras agradecer al anterior subdelegado su ''entrega al servicio público y su total colaboración en esta etapa de transición'', demostrando que ''las instituciones están por encima de cualquier tipo de partidismo'', calificó a Encarnación Pérez como ''la experta en trabajo social'' del ''equipo multidisciplinar'' de las subdelegaciones, ''capacitada para analizar las necesidades y problemas de las personas, colectivos y comunidades'' de Salamanca.
Y es que, según Barcones, ''conceptos como justicia social, Derechos Humanos, responsabilidad colectiva o respeto a la diversidad son fundamentos sobre los que ha pivotado el trabajo docente'' de la nueva subdelegada del Gobierno dentro de su labor en la Universidad de Salamanca, una institución ''que llena de orgullo a toda Castilla y León'' en el año de su VIII Centenario.
En su nuevo cargo, Barcones pidió a Pérez que, además de representante del Gobierno en Salamanca, ''sea también la representante de Salamanca en el Gobierno'', para ''encajar de la mejor manera posible'' los proyectos de Salamanca ''dentro de las posibilidades de la Administración del Estado''.
En ese sentido, la delegada del Gobierno aseguró que prefiere ''ser prudente'' y que conozcan a su equipo ''por los hechos más que por las palabras'', por lo que primero analizarán ''a fondo, pero lo más rápidamente posible, todas las acciones de la Administración Central en esta provincia'' de cara a proponer ''soluciones factibles, sin mentiras ni falsas expectativas''.
También garantizó ''transparencia y feminismo'', puesto que ''el Gobierno de Pedro Sánchez lo es'', ya que ''la igualdad entre hombres y mujeres es tan irrenunciable como irreversible'', y por ello consideró intolerable ''el maltrato machista y la violencia de género'' y prometió la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para ''proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades'', además de la colaboración con el resto de instituciones para ''crear empleo digno y cambiar todo aquello que ha supuesto una merma en la calidad de vida de los españoles más humildes''.
Al acto de toma de posesión de la nueva subdelegada del Gobierno en Salamanca acudieron, además de la delegada del Gobierno en Castilla y León, el alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias, y del delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Salamanca, Bienvenido Mena, entre otras autoridades.