No todos los usuarios de las vías públicas tienen las mismas necesidades.  Para garantizar la seguridad de los más vulnerables, la empresa CIDAUT ha puesto en marcha el proyecto VRUITS. Engloba tres sistemas: uno de ellos es este semáforo, ubicado en la calle Santiago.  Según sus promotores es inteligente y cuenta cuando debe hacerlo.

Si la persona pasa de un lado a otro puede contarle dos veces, este detecta que es la misma persona y no le contaría, discrimina. Y tampoco cuenta al que pasa por la acera sin cruzar la calle.  En Alcalá de Henares funciona otro sistema. El semáforo detecta la trayectoria del peatón y decide si se necesita extender la fase verde del peatón porque sea un usuario de movilidad reducida.

Y en Holanda un mecanismo detecta la proximidad de una bicicleta y evita la colisión.  El ayuntamiento de Valladolid quiere usar mecanismos inteligentes en su línea de autobuses.

La implantación en los vehículos de sistemas  que detecten al semáforo y le da prioridad semafórica. Reducir los tiempos de desplazamiento y mejorar la velocidad comercial. Medida que entraría en vigor después del próximo verano fecha en la que también se pretenden implantar nuevas líneas y frecuencias.