El hombre de 91 años que estaba en la vivienda en la que explotaron dos bombonas de propano en Salamanca "está evolucionando favorablemente" y está previsto que en las próximas horas abandone la Unidad de Quemados del Hospital Río Ortega de Valladolid.

Según ha informado el alcalde de la ciudad, Alfonso Fernández Mañueco, "hoy o mañana" será trasladado de nuevo al Hospital Clínico Universitario de Salamanca para continuar con su recuperación.

De esta forma, este hombre será el único que permanezca ingresado de los nueve heridos, dos de ellos menores, por la deflagración del piso en el que vivía en la calle Príncipe, esquina con la Plaza del Barrio Vidal, y que, según técnicos municipales, ha dejado al edificio con importantes daños que previsiblemente supondrán su demolición.

Alfonso Fernández Mañueco ha indicado que, dentro de la "tragedia para varias familias de la ciudad", es "un gran regalo de Navidad" que no haya que lamentar víctimas mortales después de comprobar cómo quedó el inmueble.