La Organización Mundial de Turismo (OMT) puso este lunes a Valladolid como ejemplo del turismo urbano de escapada por garantizar la calidad de las experiencias de los viajeros y apostar por la sostenibilidad y la colaboración público privada. El secretario general adjunto de la OMT, el colombiano Jaime Alberto Cabal, recordó que Valladolid se quiere posicionar como un importante destino cultural y enológico de corta estancia y nuestra organización lo apoya con "todo entusiasmo".

Cabal, quien inauguró la conferencia sobre 'City breaks: generando experiencias turísticas innovadoras', reconoció que las ciudades buscan nuevas formas de gestionar sus destinos, donde cobra una relevancia especial la gobernanza y las políticas públicas y privadas. También se refirió a los destinos menos visitados que también apuestan por diseñar productos turísticos para captar esas "escapadas de ensueño" porque muchas personas quieren romper la rutina de las ciudades. Habló del reto de ser más creativos para atraer flujos y segmentos de mercado que tienen estas ciudades menos visitadas. "Se generan grandes oportunidades para estas pequeñas localidades y pueblos", añadió.

El responsable de la Organización Mundial de Turismo señaló que el perfil del turista ha cambiado en los últimos años, al pasar de ser pasivo a activo porque es una persona que desea vivir experiencias, por lo que se interesa por la cultura, la historia y participa en los eventos culturales y deportivos y disfruta de la gastronomía. "Hay que acomodarse a esta nueva realidad", explicó. Puso el ejemplo de usar "positivamente" las herramientas tecnológicas para hacer "más inteligentes" los destinos. 

Consideró que el reto es interpretar esas oportunidades a partir de los gustos y necesidades de los turistas. "Los segmentos de mercado se van a disputar a la hora de diseñar el producto, la creatividad y la forma de promocionarlo", añadió. De ahí que entre hoy y mañana, en Valladolid se analizarán casos de éxito como los de Lisboa (Portugal), Alba Iulia (Rumanía), Marrakech (Marruecos), Turín (Italia), Liubliana (Eslovenia), Sevilla, San Sebastián y Madrid. La conferencia, que cuenta con la organización del Ayuntamiento de Valladolid y Madison, busca ser una plataforma para intercambiar experiencias y perspectivas sobre el potencial y los desafíos de los 'city breaks' como experiencias de ocio para los viajeros.

El turismo urbano es uno de los segmentos de más rápido crecimiento en todo el mundo. Atrae a visitantes que se desplazan tanto por negocios como por ocio, y genera ingresos que sustentan el desarrollo socioeconómico y cultural de las ciudades. Cabal recordó que más del 50 por ciento de la población mundial reside, en la actualidad, en las ciudades, un porcentaje que se prevé hasta el 70 por ciento en 2050.

La creciente popularidad de viajes de corta duración a destinos urbanos, principalmente en Europa, ha posicionado a numerosos destinos de ciudad a mercados y segmentos nuevos, aumentando el número de visitantes.

Mesa del Turismo

La concejala de Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Valladolid, Ana Redondo, valoró el "buen trabajo" realizado por el Consistorio en materia de turismo pero también subrayó la colaboración público privada, al calificarla como una "herramienta básica" para el sector. A su juicio, las empresas tienen que "arrimar el hombro" para sumar. En ese sentido, mencionó la Mesa del Turismo que ha logrado la implicación de todo el sector para generar oportunidades y llevar a cabo un turismo sostenible.

Redondo destacó que en los dos años de funcionamiento de la Mesa del Turismo, Valladolid ha crecido por encima de la media nacional y de Castilla y León, en número de viajeros y pernoctaciones. "El llamado 'city break' es un turismo de escapada porque estamos ante un turismo muy diferente porque los viajeros demandan otras cosas diferentes", precisó. Aseguró que el Ayuntamiento de Valladolid está interesado en captar ese tipo de turismo de escapada, por generar riqueza y empleo. "Esperamos que Valladolid sea una 'city break', donde los turistas encuentren un lugar donde romper esa monotonía durante un puente, un fin de semana o una semana", subrayó.

La concejal citó algunas de las claves de este tipo de turismo centrado en la identidad del destino, la diferenciación de la oferta, la adaptación a las necesidades de cada cliente y la gestión inteligente. "Hay que saber quienes somos y buscar nuestra esencia en la cultura, el arte, la tradición y la historia, sin olvidar la gastronomía, y hacerlo en un lugar único y deseable para visitar y disfrutar", apuntó.

También señaló que "todos somos distintos pese a la globalización", por lo que es necesario adaptarse a los deseos de cada uno de los viajeros y familias. A su juicio, cualquier destino debe saber adaptarse con inmediatez por lo que es fundamental crear productos propios y adaptarlos. En cuanto a la gestión inteligente, Ana Redondo recordó que el smart city no es un fin sino un medio útil y necesario. "Hay que llegar a un mundo global pero sin olvidar que lo importante es el turista y el viajero", consideró. De esta manera, se logrará que tenga una experiencia única y que la recuerde para contarla a otras personas.

Destino turístico inteligente

Por su parte, el subdirector general de Desarrollo y Sostenibilidad Turística de la Secretaría de Estado de Turismo, Rubén López, aseguró que el Gobierno de España trabaja "enormemente" en el proyecto de destino turístico inteligente, más conocido como DTI. Todo ello con el objetivo de gestionar el sector de forma más eficiente y sostenible, además de incrementar su rentabilidad. "Hay que hacer frente a los retos de todas las ciudades, aunque cada una lo enfoque en función de sus peculiaridades", manifestó.

López recordó que el turista actual a las ciudades busca arte, cultura, enograstronomía, vida urbana, vida nocturna y compras. Explicó que este viajero es "particular" al viajar más de tres veces al año, con un alto poder adquisitivo y que viaja menos días pero deja más dinero en el destino. España acoge cada año a unos 9 millones de este tipo de turista, que deja unos 25.600 millones de euros. "El objetivo de nuestro plan de marketing es cuando se le pregunte a un turista elija una ciudad como Valladolid para visitar en una escapada", concluyó.