ÁVILA

Iñaki Urdangarin ingresa en la prisión de Brieva, Ávila, para cumplir condena por el caso Noos

Deberá pasar la primera noche en el módulo de ingresos y después, probablemente y dadas sus características, se le ubique en el denominado 'módulo de respeto'

Ical

El exduque de Palma Iñaki Urdangarín ingresó a primera hora de este lunes  en la prisión de Brieva, en la provincia de Ávila, para cumplir la condena de cinco años y diez meses que le impuso el juez por varios delitos de corrupción dentro del caso Noos. Urdangarín llegó ayer a España procedente de Ginebra, donde tiene fijada su residencia.

Para cumpliar la condena se barajaron varias prisiones y no fue hasta última hora cuando se determinó que la cárcel abulense es la elegida. El Supremo confirmó el pasado martes la condena para Iñaki Urdangarín, con una ligera rebaja frente a los seis años y tres meses que le había impuesto la Audiencia de Palma, y se le dio de plazo hasta la jornada de hoy para su ingreso en prisión.

El centro penitenciario elegido por Urdangarín se construyó en Brieva, localidad situada a siete kilómetros de la capital, en 1989, y cuenta con 43.540 metros cuadrados. Se trata de un centro de pequeño tamaño con 162 celdas y 18 complementarias, según los datos de Instituciones Penitenciarias.

El protocolo establece que Urdangarín pase las primeras horas en el módulo de ingreso y que después sea trasladado al módulo que se considere más apropiado. En el caso de Brieva sería al de hombres, que fue reformado y que está vacío desde la salida de Luis Roldán, exdirector General de la Guardia Cvil, que dejó la prisión en 2010 tras cumplir diez años de condena,

Si la Junta de Tratamiento de Brieva decide mantenerle en esta cárcel inicialmente para mujeres, tendrá un plazo de dos meses para clasificar al recluso, pero si se decidiera un traslado tendría que ser la junta del nuevo destino quien proponga el grado donde quedaría situado. En la propuesta deben estar fijados los destinos, actividades, programas educativos, trabajo y actividades ocupacionales o de otro tipo que tenga que asumir el interno, tal y como se recoge en el artículo 103.3 del Reglamento Penitenciario.

Urdangarín deberá pasar la primera noche en el módulo de ingresos y después, probablemente, y dadas sus características, se le ubicaría en el denominado ‘módulo de respeto’. En este caso quedaría clasificado como interno de segundo grado que tiene como obligación aceptar una serie de normas de comportamiento, higiene y organización de la vida diaria en el recinto penitenciario.

Aunque la Justicia ha determinado imponer una pena calificada como de duración media, el exduque de Palma podría conseguir el tercer grado una vez que haya cumplido dos tercios de la condena impuesta, en su caso después de dos años de estancia. Para entonces deberá de haber mantenido en ese tiempo recluido una buena conducta, lo que le permitiría pasar a un régimen de semilibertad.