Muchos hoteles del país necesitan un lavado de cara. Son edificios históricos con solera que, en algunos casos, contaminan demasiado. El gobierno ha puesto en marcha el Plan PIMA Sol, que destinará 400 millones de euros para que los establecimientos reduzcan sus emisiones de CO2. 

Un ejemplo de sostenibilidad y ahorro energético lo tenemos en uno de los hoteles más modernos de Castilla y León. Es el Vincci Frontaura de Valladolid y utiliza la domótica para controlar el gasto de energía.