La vida para Alberto cambio cuando llegó Cuca, un perro labrador jubilado de la ONCE que desde hace meses comparte espacio con 13 personas en esta residencia de ancianos leonesa..
A sus 13 años, es una más de la casa, porque no ha llegado aquí para ser un perro de terapia, sino para compartir con ellos los últimos años de sus vidas.
Desde que Cuca llegó al centro el estado de ánimo de los pacientes ha mejorado, ya no hay ni rastro de aquellos ratos de soledad, porque el cariño de este perro les ha devuelto la sonrisa cuando más la necesitaban.