El profesor de la Universidad de Salamanca (Usal) Alberto del Rey aseguró en Madrid que "la crisis económica ha acelerado el proceso de despoblamiento" de regiones como Castilla y León. Regiones para las que la inmigración era el último recurso y "se ha demostrado que con la recesión han sido los primeros damnificados".
Del Rey, que participó en la jornada 'Retos demográficos y nuevo escenario migratorio en España', organizado por Funcas, explicó que las elevadas tasas de desempleo motivaron que muchos inmigrantes salieran de Castilla y León. No en vano, mencionó la falta de oportunidades de empleo como una de las principales causas de la despoblación, al que se añade el problema de la natalidad, el envejecimiento y la dispersión de la población.
En ese sentido, recordó que en los años 90 "el boom migratorio vino a compensar la población pese a tasas de natalidad y fecundidad muy bajas. Permitió que las poblaciones se mantuviesen, pero a raíz de la crisis se ha acelerado el proceso", incidió.
El profesor de la Universidad de Salamanca advirtió que "en Castilla y León tenemos un saldo migratorio negativo terrible", y no ya por los que se van fuera de España, sino por los que se van a otros puntos del país, donde la principal preocupación reside en que es "un saldo de mano de obra muy cualificada, jóvenes muy bien educados para los que no tenemos puestos de trabajo".
Por ello, demandó "intentar que no se vaya lo que tenemos porque si conseguimos frenar esto ya hemos ganado algo". También abogó por generar condiciones de empleo, vida y educativas, entre otras. "Se necesitan medidas a muy largo plazo que permitan proyectos de vida a la gente", señaló.
La doctora en Sociología por la Universidad de Wisconsin-Madison y actualmente profesora de investigación en el CSIC, Teresa Castro Martín, destacó que la clave está en "atraer oportunidades económicas". "El reto es demográfico pero las soluciones siempre son económicas", afirmó. Sobre todo en territorios en los que "se juntan baja fecundidad, envejecimiento, dispersión de la población y pocas oportunidades económicas". A su jucio, hay que "dar oportunidades económicas a los jóvenes que son los que forman familias y los que van a cotizar".
Andreu Domingo, del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de Barcelona lo resumió en que "la evolución de la población estará influida por la inmigración, y eso dependerá de la coyuntura económica".