Entre 2014 y 2020.

Herrera afirma que habrá una inversión de 100 millones de euros al apoyo de la investigación

  • El presidente de la Junta defiende que la 'racionalidad' debe formar parte del ADN de la Universidad.

Ical

El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, destacó este viernes en Salamanca que entre los años 2014 y 2020 se dedicarán más de 100 millones de euros a apoyar la investigación y se mantendrán las convocatorias de ayudas para proyectos de investigación y para contratos predoctorales.

Herrera, que participó en la inauguración del curso académico 2014-2015 de las universidades de Castilla y León y que se celebró en Salamanca, apostó por “forjar un círculo virtuoso”, en el que la concentración de esfuerzos en la calidad y competitividad de los investigadores signifique el acceso a un volumen de recursos mayor.

En este sentido, destacó la importancia de la Estrategia de Investigación e Innovación para una Especialización Inteligente, conocida como RIS3, cuya previsión recordó que es la de movilizar más de 9.100 euros en el periodo de su vigencia.

En su desarrollo, explicó que tendrá un gran protagonismo el sistema universitario de Castilla y León, debido a que el 60 por ciento de los investigadores desarrollan su actividad en las instituciones académicas.

Esta estrategia, añadió, pone el acento en seis grandes macroactividades económicas que suponen el 59 por ciento del PIB de Castilla y León y que son en las que la región está más especializada que la media de España y en las que tienen capacidad de competir con los mercados exteriores. Se trata de la automoción, la agroalimentación, la salud y la calidad de vida, la energía y el medio ambiente, el hábitat y el turismo, y por último, el patrimonio y la lengua.

Situación de equilibrio

Herrera reconoció que este curso es el último de una Legislatura autonómica marcada por la “crudeza de la grave crisis” y el sistema universitario de Castilla y León no ha sido “ajeno” a los problemas económicos asociados a la misma, pero destacó aún así, que las instituciones académicas han conseguido vadear estos años de gran dificultad con una situación continuada de equilibrio en sus presupuestos y en un escenario de reducción de su deuda.

Así, continuó, ha logrado ser uno de los sistemas menos endeudados de España y estimó que el año 2015 finalizará el pago de los convenios de saneamiento de la deuda de las tres universidades públicas que la tenían.

El presidente afirmó que esto ha sido posible por la decisión de concentrar los recursos disponibles en los servicios públicos fundamentales, por una “gestión comprometida” y “eficaz” de los equipo de Gobierno de las universidades y por decisiones que calificó de “nada gratas” como la subida de tasas, pero que aportaron recursos adicionales “imprescindibles” para mantener la calidad del servicio público”.

Sobre este aspecto incidió y defendió la necesidad de “no repetir errores” ni “excesos del pasado”, por lo que agregó que la “racionalidad en el gasto, la rentabilidad social en la inversión y la eficiencia en el desempeño, no pueden considerarse ya materias optativas”, sino que “deben formar parte del propio ADN de la Universidad”.

Asimismo, el presidente de la Junta se mostró a favor de orientar la configuración de la oferta de titulaciones para que sea “coherente y compacta”, con el fin de evitar duplicidades y que potencie la especialización de cada universidad. En su opinión, no se puede permitir la proliferación de títulos sin una adecuada evaluación y sin una eficaz coordinación.

No parece “prudente”, incidió, que la sociedad financie, de manera ilimitada, títulos que despiertan el interés de muy pocos alumnos, con escasa empleabilidad, y a veces repetidos en los diferentes campus.

Durante su intervención, explicó que ayer mismo solicitó una vez más al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, “la eliminación, o al menos el flexibilizar” la tasa de reposición del 10 por ciento que se ha aplicado en educación en los últimos años.

Por último, se refirió a una de las “grandes misiones” de la universidad, la transferencia del conocimiento, una cuestión a la que explicó llevan dando importancia desde el año 2008 en la Comunidad Autónoma, con la puesta en marcha del programa TCUE, coordinado con la Fundación de Universidades y Estudios Superiores de Castilla y León y en el que participan las ocho universidades presenciales.

Este programa, concretó que ha supuesto inyectar más de 14 millones de euros para favorecer proyectos de I+D+i conjuntos entre Universidades y empresas, aumentar patentes universitarias y el de empresas innovadoras creadas con base en la Universidad.

En la actualidad, resaltó que la Junta trabaja en la elaboración de un nuevo Plan de Transferencia del Conocimiento para el periodo 2015-2017, que en el marco de la RIS3, dará continuidad a los proyectos ya iniciados de cara a incrementar la competitividad. Estará listo a finales de año y pondrá énfasis en la coordinación de esfuerzos y la búsqueda de sinergias, así como en la atracción de fondos del sector privado.

Este acto estuvo presidido por el rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, mientras que el catedrático de Historia del Derecho y de las Instituciones de la Universidad de Salamanca, Benjamín González fue el encargado de impartir la lección inaugural, titulada ‘El Todo y las Partes (Una aproximación jurídico-institucional al proceso de formación de España y de su organización territorial)’.

A la apertura del curso académica, asistieron además los rectores de las universidades de Burgos, León, Valladolid, Pontificia, Católica de Ávila, Europea Miguel de Cervantes, IE University; el consejero de Educación, Juan José Mateos, el delegado del Gobierno en Castilla y León, Ramiro Ruiz, el acalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de la Diputación Provincial de Salamanca, Javier Iglesias, además del equipo rectoral, entre otras autoridades políticas y académicas.