LABORAL | en empresas de más de 50 empleados

CCOO propone planes de igualdad por ley para evitar la brecha sociolaboral de la mujer

Un estudio del sindicato aboga por recuperar lo presupuestado hace cuatro años para impulsar medidas de apoyo a la conciliación familiar y laboral en la Comunidad

Ical

Comisiones Obreras de Castilla y León se postuló a favor de que los partidos políticos que obtengan representación puedan regular por ley la existencia de planes de igualdad en empresas de más de 50 empleados, que permitan evitar la brecha sociolaboral de la mujer. "Actualmente solo están obligadas a tenerlo de más de 250 trabajadores, pero el tejido productivo de la Comunidad está compuesto sobre todo por microempresas y pequeñas empresas", según señaló el secretario autonómico del sindicato, Ángel Hernández.

Así lo puso de manifiesto en la presentación del estudio denominado 'Las Mujeres en Castilla y León. Acercamiento a su situación social y laboral', que se llevó o cabo en la sede del Consejo Económico y Social (CES) ante delegadas de CCOO en centros de trabajo e integrantes de las distintas uniones provinciales. El documento, de más de 300 páginas, contempla distintas propuestas tras analizar 16 escenarios distintos para tratar de reducir las distintas brechas que generan desigualdad en las mujeres frente a los hombres en el mercado del trabajo.

Hernández instó a la Administración regional a que mediante un marco legislativo consensuado con los sindicatos y la patronal, en el desarrollo del Diálogo Social, se acuerde la existencia obligatoria de los planes de igualdad, incentivando para ello económicamente a las pequeñas empresas, y que se pueda hacer un seguimiento riguroso de su cumplimiento. "En la empleabilidad se encuentran las grandes diferencias, sin entrar en la gran brecha salarial que padecen las mujeres. Prueba de ello es que la obtención de un menor salario por su parte se deriva en que ocupan muchos más puestos de baja remuneración que los hombres", señaló.

Al respecto se mostró partidario de que se cree un marco de trabajo para que existan modalidades de contratación que favorezca a la mujer "y eso depende mucho del rol de los contratadores privados y públicos", agregó, al tiempo que recordó que es también el sector laboral femenino el que sufre una mayor temporalidad en los contratos y, a su vez, en lo que se refiere a los efectuados a tiempo parcial.

Para el dirigente sindical, los datos del estudio, obtenidos de bases públicas, ponen de manifiesto por ejemplo que existen más mujeres universitarias que hombres "y seguramente con mejores expedientes académicos, pero no eso no supone que tengan mejor inserción laboral". Por ello, aunque defendió que haya "paridad" en lugares como el Congreso, los consejos directivos de empresas u organizaciones sindicales, comsideró que "debe existir negociación colectiva que incluya aspectos que eviten la discriminación que sufren las mujeres en el panorama laboral".

Mayor brecha con la crisis

Por su parte, la secretaria del Área de Mujer y Políticas de Igualdad de CCOO de Castilla y León, Rosa Eva Martínez, precisó que, especialmente, los años de crisis comprendidos entre 2010 y 2014 han propiciado que la brecha salarial entre hombres y mujeres se haya acrecentado en cuatro puntos, pasando de 21 a 25 puntos la diferencia existente. "Se ha notado especialmente en lo que se percibe en profesiones más cualificadas y en puestos directivos", denunció.

Igualmente, recordó que la crisis económica ha sido especialmente dura con las mujeres en el plano laboral en los referente a las políticas de igualdad y de familia. "Hay que recuperar los presupuestos de 2010 en este ámbito por que todos los recortes han perjudicado a las excedencias, reducciones de jornada o ayudas por guardería, lo que ha derivado en que la conciliación familiar para la mujer sea aún más complicada", expuso.

A ello se añade, tal y como indicó Rosa Eva Martínez, que las mujeres asumen una media de más de tres horas de dedicación al ámbito familiar y doméstico fuera del trabajo, mientras que los hombres apenas superan las dos horas de dedicación. "Está claro que hay que seguir profundizando y aportar recursos suficientes desde las administraciones, con el consenso de patronal y sindicatos, para que se rompa de una vez por todas las desigualdades en el mercado del trabajo", concretó.

Propuestas sindicales

Entre las propuestas contempladas en el documento de CCOO denominado 'Las Mujeres en Castilla y León. Acercamiento a su situación social y laboral', se considera necesario que se realice un trabajo de sensibilización y orientación en todos los ámbitos para no perpetuar la segregación por sexos en el mundo laboral. A su vez se recomiendan políticas de empleo que favorezcan la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, y la exigencia de que se incremente el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta situarlo en el 60 por ciento del salario medio.

Igualmente, se propone que se mantengan los incentivos específicos relacionados con la contratación de mujeres y la transformación en indefinidos de sus contratos temporales. Junto a ello, se pide una negociación colectiva que incluya planes de igualdad para mejorar las condiciones laborales de las trabajadoras, y donde se apueste por actualizar y mejorar los derechos de conciliación.

Asimismo, desde Comisiones Obreras de Castilla y León se entiende que deben existir protocolos de actuación en las empresas para garantizar la protección de las trabajadoras embarazadas o en periodo de lactancia natural.

En otro punto, el sindicato pide en este documento a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades que ponga en marcha el Plan Específico de Apoyo a las Mujeres del Mundo Rural 2010-2015, así como que la Junta favorezca las políticas de natalidad y de conciliación desde el ámbito público, que permitan asentar población en el territorio rural y urbano, incidiendo en la prestación de servicios con calidad y accesibles.

Finalmente, se realizan otras propuestas relacionadas con las campañas de sensibilización y concienciación sobre lo que significa la corresponsabilidad y la igualdad en el ámbito doméstico; y la equiparación de los derechos relacionados con el nacimiento de hijos para que existan los mismos periodos de tiempo de permiso en mujeres y hombres, pudiendo disfrutarlos de manera simultánea o sucesiva como ocurre en otros países europeos.