Ley de la Memoria Histórica

Exigen una multa para el Ayuntamiento de León por no haber cambiado los nombres de las calles para dar cumplimiento a la Ley de Memoria Histórica

El abogado Eduardo Ranz recuerda que se ha requerido el expediente de las calles hasta en tres ocasiones desde principios de año sin haber dado cumplimiento a esta petición.

Ical

El abogado Eduardo Ranz ha presentado ante el Juzgado Contencioso-Administrativo número 1 de León, que conoce la causa de las calles franquistas, un escrito en el que exige que se imponga una multa al Ayuntamiento de la capital leonesa por no haber entregado a tiempo el expediente de las calles franquistas. Según explicó el abogado, en enero de este año, y después de haber sido requerido hasta en tres ocasiones para ello por el juzgado, el Consistorio no ha cumplido con su obligación administrativa ''más básica''.

El 30 de enero de 2017 se exigió la sanción al Ayuntamiento, y transcurridos once meses, esa sanción no se ha producido, con lo que antes de terminar el año, se reitera el cumplimiento del precepto legal. ''En un estado de derecho no hay excepciones para el cumplimiento de la ley'', recordó el letrado madrileño de raíces leonesas a través de un comunicado.

Según el artículo 48.7 de la Ley Reguladora de la Jurisdicción Contencioso-Administrativa (LJCA), ''transcurrido el plazo de remisión del expediente sin haberse recibido completo, se reiterará la reclamación y, si no se enviara en el término de diez días, tras constatarse su responsabilidad, previo apercibimiento del secretario judicial notificado personalmente para formulación de alegaciones, el juez o Tribunal impondrá una multa coercitiva de 300 a 1.200 euros a la autoridad o empleado responsable. La multa será reiterada cada veinte días, hasta el cumplimiento de lo requerido''.

Como hijo de abogada leonesa, Ranz afirmó que la ciudad de León ''sería mucho mejor'' si en vez de 34 calles franquistas en la ciudad, hubiera en el callejero simbología dedicada a mujeres como Rudesinda Fernández Pereiro (Rudes), que fue la primera abogada mujer de León, y que pasó más de un mes en el campo de concentración de San Marcos, en 1938, por negarse a levantar el brazo a instancias de un falangista que la paró en plena calle y la ‘escoltó’ hasta su casa.