El consejero de Educación de la Junta, Fernando Rey, instó hoy a los grupos parlamentarios de las Cortes a que alcancen e impulsen una posición de Comunidad en torno a la petición al Gobierno de España para que elabore una prueba única estatal de acceso a la universidad, que evite desigualdades en el acceso por los distintos niveles de exigencia de unas comunidades autónomas a otras.
Así lo señaló Rey durante su comparecencia en la Comisión de Educación de las Cortes para explicar el contenido de las reuniones de la Conferencia Sectorial de noviembre de 2016 y marzo de 2017, así como su intervención en la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado, también el pasado mes de marzo.
Según explicó el consejero, él siempre se mostró en contra de las reválidas de cuarto de la ESO y segundo de Bachillerato pero reconoció el valor de las evaluaciones externas y no tanto de las internas porque, a su juicio, el sistema tiene "desequilibrios territoriales" que hacen necesarios mecanismos para identificar los problemas y "sin evaluaciones externas nos movemos a ciegas".
Evaluaciones que han sido útiles en tercero y sexto de Primaria para identificar carencias y poner planes o soluciones. En todo caso, sostuvo que tanto la evaluación de sexto de Primaria como la de cuarto de Secundaria se harán de manera muestral, tal y como se acordó con los propios centros.
Por lo tanto, a partir del próximo curso estas dos evaluaciones se harán de manera muestral, con una elección estadística de centros que cada año, dijo, irán variando hasta completar la totalidad de centros educativos de Castilla y León.
En cuanto a la prueba de segundo de Bachillerato donde, al igual que en la de cuarto de la ESO, el Gobierno dio marcha atrás y no tendrán valor académico para poder superar la etapa, recordó que la solución llegó tarde pero se realizará una prueba similar a la antigua PAU (Prueba de Acceso a la Universidad). Una solución, dijo, buena a corto plazo pero a medio plazo, sostuvo, no le convence.
No le convence, entre otras cosas, porque según un estudio de la Universidad de Valladolid hay un alto porcentaje de estudiantes de otras comunidades en carreras con nota alta de acceso en Castilla y León, consecuencia, dijo, de la disparidad en el nivel de exigencia entre comunidades en la prueba de la selectividad. "Lo realmente eficaz es un examen único para todo el país", remarcó.
Según explicó, la nueva ley debería introducir una única prueba estatal de acceso a la universidad y no 17, para evitar que comunidades como, a su juicio, es el caso de Castilla y León se vean perjudicadas a la hora de acceder por su nivel mayor de exigencia para la obtención de resultados. Por ello, instó a los grupos políticos presentes en la Comisión a que acuerden una posición "única" para pedir al Gobierno que incluya en la ley este examen único que evite estos desequilibrios e, incluso, perjuicios para algunas regiones, entre ellas Castilla y León.
Bachillerato
El consejero, que reconoció que lo ha pasado "mal" con este asunto de la prueba de segundo de Bachillerato, deseó que se celebre la prueba ya y que todos aprendan de lo ocurrido para no volver a repetirlo aunque, subrayó, por suerte los alumnos ya saben cómo se va a desarrollar y con qué criterios, tal y como ha marcado el Ministerio de Educación.
Criterios y desarrollo que, para la portavoz de Podemos en la materia, Lorena González, han llegado tarde y han impedido una planificación correcta por parte del profesorado. Han sido, indicó, "directrices vagas" que han provocado que, a día de hoy, los alumnos y profesores no sepan cómo van a ser las pruebas. No obstante, González aseguró que el responsable de esta cuestión no es sólo el consejero, sino el ministro, Íñigo Méndez de Vigo, al que calificó de "incompetente, torpe e ineficaz", al tiempo que calificó de "insulto" que el PP aluda al pacto por la educación para revisar la Lomce "a la vez que sigue implantándola".
Para el portavoz socialista en la Comisión, Fernando Pablos, lo que ha de quedar claro es que una situación de incertidumbre como la vivida este año con la prueba de segundo de Bachillerato "no se puede repetir", al tiempo que coincidió en la necesidad de que se establezca esa prueba única estatal, aunque recordó que también hay muchos alumnos de países limítrofes que acceden de "forma sencilla" a las universidades de Castilla y León.
Mientras, el portavoz del Grupo Mixto en la Comisión, José Sarrión, dejó clara la necesidad de que se plantee la derogación de la Lomce como "primer paso", mientras que el procurador de Ciudadanos José Ignacio Delgado también destacó como asunto fundamental la evaluación de aspectos como el bilinguismo donde, a su juicio, no existe la igualdad de oportunidades, mientras que la portavoz del PP, Isabel Blanco, reconoció que hay que seguir avanzando pero "las cosas se están haciendo bien".
Otro de los asuntos que generó debate durante la Comisión fue la eterna discusión sobre los centros públicos y concertados. Así, mientras el consejero y la portavoz del PP Isabel Blanco aludieron a la necesidad de que estas dos opciones sean complementarias, los portavoces de Podemos, PSOE y Mixto recordaron que los centros concertados han de ser "suplementarios" o "subsidiarios" y denunciaron que, en ocasiones, genera conflicto de intereses como el caso de Arenas de San Pedro (Ávila) donde se van a fusionar dos institutos públicos cuando hay un centro concertado en la localidad que, según señaló el consejero, no es competencia porque es de Primaria y no de Secundaria.