Cáritas, Cruz Roja, FSC Inserta de la Once y Fundación Secretariado Gitano presentaron hoy el balance de los últimos 16 años del denominado 'Programa Operativo de Lucha contra la Discriminación' en Castilla y León, donde las ayudas del Fondo Social Europeo (FSE) y el apoyo de las distintas administraciones públicas y empresa privada han contribuido a atender a 84.010 personas vulnerables, logrando 39.125 contrataciones y ayudando a crear 539 empresas a emprendedores. El programa se concibió inicialmente para tener siete años de vida, pero se prolongó finalmente otros nueve más y concluyó en diciembre de 2015.
Las acciones de inserción con itinerarios personalizados lograron formar a 27.930 personas con ayudas europeas a través de itinerarios personalizados, lo que supone un porcentaje de un 33,24 por ciento sobre el total de 84.010 personas vulnerables que se dirigieron a las entidades sociales para ser atendidas. "Hemos trabajado juntos con la inserción laboral como opción real y efectiva, basada en la igualdad de oportunidades, sobre todo para jóvenes, mujeres, parados de larga duración, migrantes, y personas con discapacidad y en riesgo de exclusión social", dijo María del Mar Fresno, directora territorial de la Fundación Secretariado Gitano.
Los programas sociales contra la discriminación se han confeccionado "con soluciones adaptadas a los participantes y su entorno familiar y social", añadió Fresno en declaraciones recogidas por Ical. En este sentido las acciones han consistido en acogida, orientación, formación e intermediación con empresas para la realización de prácticas y la inserción laboral.
"Se trata de datos relevantes y potentes, ya que se trata de integrantes de colectivos que vienen con una mochila cargada de piedras. Tienen problemas de idiomas, autoestima, formación, falta de experiencia o cualificación, discriminación y exclusión social", añadió Begoña Grijalvo, directora territorial de FSC-Inserta de la Once. "La mayor parte es perceptora de la Renta de Garantía Ciudadana. Por ello primero se atienden necesidades de vivienda por desaucios, manutención, vestido y luego se diseñan itinerarios personalizados para que puedan encontrar un empleo adaptado a sus necesidades familiares y de entorno social", expuso.
"Se trata de un pistoletazo de salida", indicó, para p'oder aprender habilidades sociolaborales, a elaborar un currículum, cómo hacer una entrevista de trabajo, técnicas de motivación y autoestima, idiomas, nuevas tecnologías y formación ocupacional", señaló. Grijalvo resaltó que, aunque no sea habitual, se han logrado más contratos para mujeres, 22.546, que para hombres, 16.579.
59 millones de inversión
Los empleos creados sobre todo se ciñen a jardinería, hostelería, sector de limpieza y cuidados en el entorno familiar. En total, se han gestionado en 16 años casi 59 millones de euros "para crear proyectos de vida de personas y familias en riesgo de exclusión", concretó. Los requisitos para participar son los de contar con una edad mínima de 16 años, certificado de escolaridad, situación de desempleo y discapacidad mínima de un 33 por ciento.
Por su parte, Eva Fernández , coordinadora de Cruz Roja de Castilla y León, explicó que los programas diseñados durante más de tres lustros "han sido muy operativos y han logrado empresas socialmente más responsables y creado un valor añadido grande con cambios en los procesos de inclusión, ya que el empleo da autonomía a personas vulnerables". Además, sostuvo que se ha propiciado una trasferencia de conocimiento y creado "un vehículo de trabajo común entre todas las administraciones públicas, empresas privadas y entidades sociales". Para Fernández los programas han supuesto "una revolución" a la hora de crear igualdad de oportunidades "con una suma de esfuerzos públicos y privados de cara a lograr una sociedad más cohesionada".
María Jesús Díez, coordinadora de Cáritas de Castilla y León, puso de manifiesto el gran apoyo de los voluntarios, con una media anual de 350 y en torno a los 480 algunos años para apoyar los proyectos de inserción laboral. Igualmente, de media durante los 16 años de trabajo se contrató a 130 profesionales paraprestar los distintos servicios de información, orientación, intermediación y prospección laboral, además del acompañamiento de personas en cada situación. "Entre formadores, tutores y orientadores laborales han logrado una gran motivación en un entorno bastante desesperanzador, destacando también el compromiso de las empresas en prácticas y convenios", arguyó.