Alrededor de 1.500 agricultores y ganaderos de Castilla y León acudieron a Madrid convocados por UCCL para apoyar la manifestación que celebró La unión de Uniones "para dejar patente su malestar por la situación insoportable que vienen sufriendo el sector y que tiene causas muy concretas".

La protesta, que en su conjunto reunió a 5.000 profesionales del campo de todo el territorio nacional, sirvió para denunciar el "hundimiento" de los precios que perciben por sus producciones, especialmente significativa en el sectores como patatas y hortalizas, con unas pérdidas de 3.500 euros por hectárea, así como en el sector lácteo, donde la bajada de precios se sitúa en un ocho por ciento en los últimos meses.

Una bajada que consideron "injustificada" y a la que hay que añadir, comentaron, "la incertidumbre del sector ante la desaparición de cuotas que anticipa una nueva caída de precios". "Este hundimiento de precios al productor no se ha trasladado al consumidor, en la cadena alimentaria falla algo", aseveraron.

Fuentes de la organización destacaron que a este hundimiento de precios hay que sumar el incremento de los costes de producción, que implica que en el año 2014 la renta agraria haya caído en más de un siete por ciento.

Asimismo, arremetieron contra la nueva PAC que se aplicará este año, porque "es terriblemente compleja e irresponsablemente injusta". "El cambio en el modelo de aplicación es posible, en especial la figura del agricultor activo, que debería ser aquél que perciba al menos un 33 por ciento de sus ingresos procedan de la agricultura/ganadería", defendieron.

Por último, denunciaron que la "falta de sensibilidad política" para resolver todos estos problemas "ha hecho que miles de agricultores y ganaderos salgan hoy a la calle, para que se escuchen sus peticiones, para que se les tenga en cuenta a la hora de establecer las medidas que les afectan".