El sector editorial intenta adaptarse a la era de la tecnología pero para muchos el placer de visitar una buena librería y ojear sus libros es insustituible. En Burgos está la librería más antigua de España. Lleva abierta desde 1850.

Era un joven de acción con un deseo irrefrenable de progresar intelectualmente. Su afán renovador y su espíritu crítico  le motivaron a abrir un pequeño local donde vendía novelas, poemarios o catecismos . Adquirió en Inglaterra la máquina de imprimir del momento, una Marinoni. Así creó su taller de impresión y se lanzó de cabeza al negocio editorial.

El nombre de la librería es 'La Minerva', diosa de la sabiduría y de las artes; y su lema 'La escuela redime y civiliza' resumen la filosofía empresarial que aún conserva la séptima generación.

La imprenta se cerró en 1980 y la librería cambió su ubicación en el año 60 trasladándose a la Plaza Mayor. Actualmente tienen abiertos dos establecimientos. Varias generaciones se han dedicado, y lo siguen haciendo, al noble oficio de vender libros 165 años después de Santiago.

En ellos, en las generaciones que vendrán, quizás esté la clave para dar la vuelta a las estadísticas: más de la mitad de los españoles asegura que nunca compra libros.