ECONOMÍA

CCOO y UGT pide a Defensa que permita a la Fábrica de Armas de Palencia igualar la oferta de la empresa israelí

Los sindicatos aseguraron que si existe voluntad política el contrato para la fabricación de 60 millones de cartuchos se puede quedar en Palencia

Ical

CCOO y UGT pidieron hoy al Ministerio de Defensa que dé la posibilidad a la Fábrica de Armas de Palencia, propiedad del grupo noruego Nammo, de retracto para igualar la oferta que presentó la empresa israelí IMI al proceso de la adjudicación de un contrato marco para la fabricación de 60 millones de cartucho para que la carga de trabajo se quede en la planta palentina, cuya viabilidad corre peligro.

En una rueda de prensa en la que estuvieron presentes los responsables del sector en Castilla y León de CCOO y UGT, Gonzalo Díez y Pedro Luis Hojas, respectivamente, junto a los delegados en la factoría Jesús Sardón y Atilano Rubio, aseguraron que sólo una decisión política podría salvar los puestos de trabajo en la Fábrica de Armas, cuya plantilla suma 250 trabajadores.

Jesús Sardón Rubio explicó que de momento lo que hay es una preadjudicación porque la oferta que presentó la compañía israelí es económicamente la mejor con una diferencia respecto a la que planetó la fábrica palentina de un céntimo por cartucho. Añadió que el proceso se está llevando a cabo por subasta y no por concurso por lo que es posible siempre que haya voluntad política de hacer que el contrato se quede en Palencia.

Indició, además, en que el ahorro de 600.000 euros para el Ministerio de Defensa que supondría la adjudicación a la compañía IMI “no es verdad” porque conllevaría en la fábrica de Palencia una bajada de las nóminas que tendrían su reflejo en descensos en las cotizaciones a la Seguridad Social, en Hacienda, no se pagaría el IVA de los materiales y en caso de que la empresa decidiera un ERE o un ERTE el Gobierno tendría que pagar prestaciones por desempleo.

Los representantes sindicales también pidieron a los parlamentarios que cumplan su compromiso de mediar ante el Ministerio de Defensa, aunque denunciaron que es el único partido que no se ha puesto en contacto con ellos para conocer de forma directa la situación. Aseguraron lo que sí han recibido  es el compromiso de que la fábrica recibirá dos contratos marcos que le podría dar estabilidad, pero, apostillaron, sin concretar ni la fecha ni la carga de trabajo. “No sabemos lo que va a pasar el noviembre, si el nuevo Gobierno apostará por la industria armamentística y si ese compromiso llegará alguna vez a tomar forma”, manifestaron.

Pérdidas acumuladas

Atilano Rubio denunció que a la falta de un contrato marco que garantice la actividad este año si no se adjudica la fabricación de los 60 millones de cartuchos se suma que en octubre cumple el plazo de dos años comprometido por Nammo cuando adquirió la fábrica de mantenimiento de los puestos de trabajo y pérdidas económicas acumuladas durante los dos pasados ejercicios. “Si Nammo no puede ni coger los contratos del país en el que está, mal lo tiene y nos tememos que igual que vinieron se pueden ir”, denunció.

Rubio reveló que también existe una “honda preocupación” en la dirección Nammo, que la próxima semana celebrará en Palencia su Consejo de Administración con presencia de sus máximos responsables. También la próxima semana, el día 11, concluye el plazo para la presentación de alegaciones al proceso de subasta del contrato que podría quedar adjudicado en los siguientes días.

Ambos sindicatos anunciaron que continuarán con las movilizaciones y medidas de presión. La más inmediata será su presencia el martes en la pleno del Senado, donde la senadora socialista, Miriam Andrés, interpelará directamente al ministro de Defensa, Pedro Morenés, por el proceso de adjudicación del contrato y la posibilidad de que se quede en Palencia.