MEDIO AMBIENTE

El Céder de Lubia y Agresta lideran un proyecto piloto para obtener fungicidas naturales para uso en la agricultura ecológica

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, presenta este proyecto I+D+i que se desarrollará en los próximos 3 años.

Ical

El Centro de Energías Renovables de Lubia (Céder) y la empresa Agresta liderarán un proyecto de I+D+i (Proyecto 'Esencial') que tratará de dar valor a las masas arbustivas (jara, romero, enebro) como los restos de corta de tratamiento selvícolas de especies arbóreas (pino y eucalipto) de zonas forestales sin gestión y sin valor concreto para crear productos innovadores relacionado con los aceites esenciales, bioproductos y los fungicidas naturales para la agricultura ecológica, según explicó este jueves el responsable de Agresta, Jorge Olivar.

El proyecto, que se realizará en diversas comunidades autónomas de España, está aún por definir, por lo que el grupo de trabajo definirá las zonas arbustivas y árboreas en las que se trabajará de forma piloto durante los próximos tres años. Además, está previsto que presenten el proyecto al Ministerio del ramo para obtener los más de 600.000 euros que costará investigar sobre estos nuevos productos. 

La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, participó este jueves en la presentación de este proyecto, y reiteró la apuesta ''firme y decidida'' del Gobierno de España en la lucha contra el cambio climático.

El Grupo Operativo 'Esencial', que pondrá en marcha este proyecto de I+D+i busca, según Barcones, la valorización de la biomasa con tecnologías tendentes a la optimización de toda la cadena de valor y el desarrollo de aplicaciones innovadoras para la obtención específica de productos de elevado valor añadido.

El Grupo Operativo 'Esencial' pretende con su proyecto que los biocidas obtenidos de la biomasa acaben siendo fitosanitarios respetuosos con el medio ambiente y para eso deberán ser testados con aplicaciones ligadas a la agricultura ecológica.

Por su parte, el subdelegado de Soria, Miguel Latorre, quien fue director del Céder de Lubia durante 12 años, destacó los beneficios que se pueden obtener de la explotación de millones de hectáreas sin gestión, y significó el valor de aprovechar la biomasa forestal como medio para evitar los incendios.