Se puede cocer un huevo con dos tarros y un trozo de papel de aluminio. Aprovechar la energía solar para cocinar hoy porque hay más de veinte grados pero también podrían hacerlo en invierno siempre y cuando los rayos apunten a un papel reflectante o al punto central de una parabólica.
Este método culinario ya es tendencia en otros países porque contribuye a mejorar el medio ambiente. El único inconveniente es el tiempo. Ha tenido que pasar hora y media para que el huevo estuviese listo y se pudiese saborear.