SUCESOS

Investigan a un vecino de El Burgo de Osma por dar muerte a un perro de caza en el río Duero

El can se encontraba atado a una cuerda por el cuello y ésta a su vez, a un bloque de hormigón

Ical

El equipo del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Soria, tomó declaración en calidad de investigado, al vecino de El Burgo de Osma S.J.M., de 52 años, como presunto autor de un supuesto delito de maltrato de animales domésticos, por la muerte de un perro de caza que apareció en las aguas del rio Duero.

La investigación se inició el pasado día 29 de marzo, cuando agentes de la patrulla del Seprona de San Esteban de Gormaz localizaron semisumergido en el río Duero a su paso por el puente de la SO-P- 4123, en la localidad de Navapalos, el cadáver de un perro.

Se sacó al animal de las aguas y se comprobó que se trataba de un perro de caza, raza 'setter ingles', y que se encontraba atado a una cuerda por el cuello y ésta a su vez, a un bloque de hormigón.

Se iniciaron las gestiones para la localización del propietario del animal así como esclarecer los hechos e identificar al autor del mismo. Mediante la lectura del microchip insertado en el animal se localizó al propietario, el cual manifestó que en el mes de diciembre le entregó el perro a otra persona, sin haber realizado el cambio de titularidad.

Efectuadas las correspondientes investigaciones, se localizó a la persona a la que se le había cedió el perro. Los agentes actuantes pudieron constatar la existencia de numerosos indicios que hacían entender que la persona investigada, una vez finalizada la temporada de caza, habría sido la que causó la muerte al animal y posteriormente lo arroja al río Duero.

A la vista de los hechos, se instruyeron las correspondientes diligencias judiciales, que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción nº 1 de El Burgo de Osma y copia a la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Soria.

Además, por parte del Seprona de San Esteban de Gormaz, se procedió a denunciar al propietario del animal ante el Servicio Territorial de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, por varias infracciones a la Ley 5/1997 de animales de compañía, al haber cedido un perro sin realizar el correspondiente cambio de titularidad.

Las personas que realicen este tipo de delitos pueden enfrentarse a penas de tres meses y un día a un año de prisión e inhabilitación especial de uno a tres años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales.