UNA VIDA DE RÉCORD

Un francés de 105 años bate el récord de la hora de ciclismo en su categoría

Robert Marchand ha encandilado al público del velódromo rodando a casi 24 kilómetros por hora durante 60 minutos

Antonio Renedo

Su secreto, añadirle un poco de miel al agua del bidón, aunque la receta de este súper hombre no se limita a circunstancias banales.

Robert Marchand fue bombero y la bicicleta es su pasión. Le descartaron para la competición por su menuda estatura pero el empeño le llevó a alcanzar un edad en la que todo le ha ido sobre ruedas. Estira una hora al día. Entrena en la estática y también se atreve a salir con la Grupeta de amigos, los que le han acompañado también en esta aventura.

Él es el que más sabe, un ciclista de la vieja escuela, que humildemente ofrece la receta de la longevidad y de estos éxitos deportivos que sorprenden a todo el mundo: "Como mucha fruta, verdura, legumbre. No fumo, no bebo alcohol y tomo poco café".

Se describe como una persona normal. En su haber dos Guerras Mundiales, haber sido testigo de la entrada de las tropas alemanas a su ciudad natal en 1914. Ha conocido a 16 presidentes de la República Francesa, ha sido campeón de gimnasia, criador de pollos y leñador.

Hoy ha vuelto a hacer historia. Nació en 1912 en Amiens y 105 años después ha inscrito su nombre en el en el velódromo de Saint Quentin, en Yvelines, muy cerca de París. Robert Marchand, nada más que decir.