Los cuatro alcaldes y los nueve presidentes de las juntas vecinales de las zonas afectadas por el incendio que la semana pasada se inició en Fabero y calcinó más de 3.000 hectáreas en el Bierzo se han reunido hoy con el Delegado de la junta en León. Le han pedido que se limpien los bosques para evitar la cercanía de las llamas a las poblaciones, que se reforesten las zonas afectadas con especies autóctonas y que estas labores las realicen vecinos de la zona.

Fue uno de los incendios más graves de este verano que obligó a desalojar varias poblaciones. Las llamas no se habrían acercado tanto a la población de haber estado limpios los bosques.

Un cinturón de seguridad fundamental para evitar que las llamas amenacen a los vecinos puesto que en algunas ocasiones tan solo la rápida actuación estos evitó una tragedia mayor.

Tan importante como la limpieza de los bosques es la reforestación de las 3.000 hectáreas afectadas. La Junta dara ayudas adicionales pero la resforestación de los terrenos dependerá de la cantidad que se destine desde el Ministerio.

Aún así los regidores y presidentes de las juntas vecinales han valorado la atención recibida por parte del Gobierno autonómico y han confiado en la rápida recuperación de estas zonas.