La sequía está afectando ya a la industria agroalimentaria. En algunos de los procesos que desarrollan hacen falta litros y litros de agua al día.

"Todos estamos muy preocupados porque en cualquier momento se nos puede restringir el suministro de nuestros cupos de asignación de agua y tenemos que parar la actividad", expone Félix Moracho, Presidente de Vitartis.

"Se prevé que haya escasez en muchas producciones y eso al final tendrá que repercutir en subidas de precios", pronostica Morancho.

Lo que se temen además desde el sector, es que esta sea una situación recurrente.